Cartelizaci�n, consociatividad, pilarizaci�n y corporatismo
Cartelización, consociatividad, pilarización
y corporatismo
La fase de construcción de una democracia con
elecciones realmente competitivas y partidos de masas, que
debió iniciarse en el momento de finalizar legalmente el
Frente Nacional (1974) fue frustrada por la emergencia y por la
consolidación del citado sistema que Katz y Mair denominan
del partido-cartel, y por el ejercicio del modelo
tradicional de clase política de patronazgo21 y patrimonialismo (Weber), patologías
de la práctica política que el cambio normativo
constitucional de 1991 no logró eliminar y curiosamente
?sin que tal fuera la intención de los constituyentes?
más bien exacerbó. Por ello, a juicio de no pocos
autores, en la perspectiva política el periodo del Frente
Nacional en su fase actual de decadencia y desintegración
como régimen, aún no ha concluido.
Hay una diferencia sustancial entre los conceptos de
cartelización y el lijphartiano de consociacionalismo
(consociación, consociatividad). Entre los países
europeos que tradicionalmente han utilizado este tipo de sistema
político, es importante el caso de Holanda. Como es
sabido, esta sociedad se halla dividida en cuatro segmentos o
culturas ?protestante ortodoxo, católico romano,
socialdemócrata y liberal 'neutral'?. La variante
consociacionalista que allí se practica es denominada
verzuiling o pilarización (con tal metáfora
identificada públicamente desde los años treinta
del siglo XX). Estas categorías poseen vínculos
entre sí, pero no para la común depredación
del Estado (como en Colombia), sino para la realización
del común objetivo de lograr "emancipación,
tolerancia e identidad nacional". 22
Wintle distingue entre consociación, pilarización y
corporatismo, en comparación con Bélgica y en una
perspectiva de Unión Europea.
Periodización
Con posterioridad a la guerra de independencia colombiana y
con referencia a lo político (formación y
deformación del Estado, formas de gobierno, modelos de
partidos, ejercicio del poder) pueden distinguirse tres
épocas histórico-políticas: (1)
formación de instituciones y del Estado liberal
clásico (1821-47); (2) centuria de fuerte conflictividad
interpartidaria (1848-1953), y (3) régimen de bipartidismo
colusivo o cartelizado (1957-2002..., agravado en sus efectos
perversos en 1970-2002...).
En los 180 años de poscolonia los colombianos no han
podido constituir realmente un Estado-nación protectivo o
siquiera neutral, ni un Estado de derecho, ni un sistema
liberal-negativo o democrático (que hubieren sido
realmente existentes). En esta larga historia tanto los
conservadores como los liberales en la segunda época, como
en la tercera, el régimen de la cartelización
partidaria, han realizado elecciones teñidas de fraude y
coacción, por lo que sólo en raras ocasiones (y
únicamente en unos pocos comicios presidenciales) pudieron
llegar a ser efectivamente competitivas (entre ambos partidos,
por ejemplo, en 1930, 1946, 1998 y 2002).
1) Época formativa de instituciones y del Estado
liberal clásico (1821-47)
Consumada la independencia de España, las élites
neogranadinas triunfantes determinan la formación de la
Gran Colombia, y con una perspectiva constitucionalista e
institucionalista-liberal convocan el Congreso Constituyente de
Villa del Rosario, crean el parlamento para la expedición
de un ordenamiento jurídico, en un trasfondo de rivalidad
entre santanderistas y bolivarianos, que da al traste con el
Estado grancolombiano en formación.
El faccionalismo prepartidista (bolivarianos-santanderistas y
ministeriales-progresistas) se prolonga en la Nueva Granada hasta
cuando se supera el personalismo excesivo y, con un sentido
orgánico de agrupamiento ideológico de
élites, adviene la formación de los partidos
conservador y liberal (1847-48). En esta época el
régimen electoral es de sufragio indirecto,
público, altamente restringido en términos
capacitarios y censitarios y, por lo tanto, de baja
participación electoral.
El cuatrienio 1828-32 fue de gran turbulencia política,
desde la convocatoria de la Convención de Ocaña,
que no se reunió hasta la elección de Santander
como presidente en 1832 ?primero por la Convención
Constituyente el 9 de marzo, y luego ratificado por los electores
de las asambleas cantonales (elegidos éstos por los
sufragantes parroquiales el 1 de julio del mismo año)?. En
los años finales de la Independencia, Bolívar fue
elegido presidente de la República por convenciones
constituyentes en 1819 y 1821, y por colegios electorales
cantonales en 1825; en 1830, el 4 de mayo el Congreso elige a
Joaquín Mosquera, pero el 4 de septiembre el general
Rafael Urdaneta toma el poder y permanece en el mando hasta el 2
de mayo de 1831. Después, el general Domingo Caicedo,
quien se había rebelado contra Urdaneta el 14 de abril,
toma posesión de la presidencia ante el Consejo de Estado
el 3 de mayo.
En la Nueva Granada los presidentes son primero elegidos por
los colegios de cantón, los que tras disponer de tres
días para deliberar (¿negociar? porque a diferencia
de USA aquí no rigió el mandato imperativo para los
electores), reunidos en la respectiva cabecera del cantón,
y debían luego enviar los pliegos con los resultados al
Congreso Nacional para el escrutinio. Como en casi todos los
comicios para presidente, en el período neogranadino
ningún candidato obtenía la mayoría
absoluta, por tal razón el mismo Congreso procedía
a perfeccionar la elección entre los tres primeros
candidatos en votación, y luego entre los dos
primeros.
Por su parte, los representantes y senadores eran elegidos por
las Asambleas Electorales de provincia, con escrutinio realizado
por las respectivas cámaras de provincia, las que en caso
de que un candidato posible no hubiera obtenido la mayoría
absoluta, procedían a perfeccionar la elección. En
época tan temprana como es la Gran Colombia, se alude o se
apela frecuentemente y de modo notable a la categoría de
la "opinión pública", tanto en la controversia
periodística como en los documentos oficiales.
|